miércoles, 22 de abril de 2009

PAGANISMO


PAGANISMO:
La voz de la sangre

Hay muchas maneras de llegar a interesarse por eso que llamamos en forma genérica Paganismo. Los hay que llegan a ello a través de su estética, sus mitos y fuerza. Otros por un deseo de unirse a la tradición de nuestros pueblos, otros por un rechazo al cristianismo y al mundo neo-cristiano (el cristianismo laico del marxismo y el progresismo), otros por motivaciones políticas y también los hay por el esoterismo.

Pero para mí, como para otros camaradas en los inicios de los años 70, el paganismo llegó de una forma indirecta: llegamos al paganismo por la comprensión de sus principios cosmológicos, no por sus formas o su ëmagiaí, sino por su esencia.
El paganismo no es una religión, no pretende ser una nueva religión almenos para muchos ëpaganosí, sino que fue un conjunto de creencias espirituales, religiosas y personales, sociales y filosóficas, que reflejaban una Concepción del Mundo.
Es esa Concepción del Mundo la que nos atrajo, y la que nos llevó a ser paganos. Luego vimos que toda esa estética maravillosa del paganismo, sus símbolos, su magia y su esoterismo, todo era reflejo de esos principios, era una ëforma de hablar implícitaí de los principios generales.

El paganismo moderno, posterior a la Guerra, nace en los años 1968, cuando un buen número de nacional revolucionarios jóvenes toman el relevo a los viejos militantes del nacionalismo anterior. Esos jóvenes buscan una forma nueva de expresar la cosmovisión ëfascistaí, una forma general de exponer en la modernidad los principios básicos de Alternativa al Sistema, pero sin basarse ya en las formas de 1939.

Esta alternativa esencial se encuentra en una serie de principios muy generales:
# Respeto a la Naturaleza y sus leyes globales.
# Sentido de la diferencia y respeto a esa diferencia, a la identidad y las raices.
# Repulsión antes el materialismo y el individualismo, sentido de Comunidad.
# Respeto a un Estilo y una Etica pero rechazo a las Iglesias y los dogmas, a las moralinas, a la concepción teocrática y monoteista de dios.
# Espiritualidad natural frente al materialismo y el egoismo del placer pero también frente a la tristeza de considerar el mundo como un valle de lágrimas.

n Admiración por la fuerza, la belleza, la alegría, los animales y todo lo que implica lucha y esfuerzo.
n Redescubrimiento de Grecia y Roma como ideal de Imperio y de Comunidad, de Arte y de Nobleza, frente al mundialismo, al Becerro de Oro y a Jerusalem.

Estas ideas básicas y otras muchas más nos llevaban a un enfrentamiento con las concepciones cristianas que hasta entonces habían sido la base ëespiritualí del nacionalismo en casi todos los casos, con raras excepciones.
Este debate intelectual y sentimental nos llevó a redescubrir el hecho pagano, que ya había sido tratado por algunos centros del arianismo y el NS en los años 20 y 30.
Pero la vía fue bastante diferente. Si en los años 20 fue el arianismo, los grupos de racismo radical, los que llevaron al paganismo como forma de entroncar con la raiz racial, con las tradiciones antigüas de los pueblos y buscar en estas tradiciones la identidad perdida con el mundialismo demoliberal, en los años 70 no fue el racismo la vía de encuentro con el paganismo, sino su concepción del mundo y su sentido artístico de la belleza y el Honor.
Podemos decir que fue Grecia la alternativa al Sistema. Como dijo Bernard Levy, la decisión ha sido siempre entre Atenas o Jerusalem. El Sistema impone Jerusalem, la Alternativa estará siempre en Atenas. Y Atenas es la esencia del Paganismo, su máxima expresión cosmológica.
De ahí que el primer gran centro cultural paganista fue GRECE, Grecia en francés, como acróstico de Grupo de Búsqueda y Estudio de la Cultura Europea.

El paganismo como Cosmología es ante todo alegre, anti-proselitista, diversa, artística y heroica.
Frente al pensamiento unitario demoliberal y el Mundialismo presenta la idea de Comunidades autónomas y autocentradas, en convivencia no agresiva ni absorvente. Se opone al mundialismo de las ideas y a la actual occidentalización (judaización en el fondo) de todo el mundo. Frente a la igualdad democrática la diversidad según los méritos. Frente al mercado del sexo y la inquisición represiva conservadora la alegría del cuerpo y la fuerza como reflejo de un espíritu sano y cultivado. Frente a la idea de ëCosaí y de ëutilidadí en los animales y Naturaleza, la concepción del hombre como parte unitaria con los animales y la Naturaleza. Frente a la caridad indiscriminada la Justicia de dar a cada cual lo que mereceÖ y entre ella dar castigo al culpable. Frente al Mercado como Norma y la Usura como realidad, el desprecio por lo monetario y su subordinación a ser una herramienta para las necesidades reales.
Y así podríamos seguir indefinidamente. Se puede decir que en TODO el paganismo es la alternativa al Sistema actual.
Tras esta constatación una gran parte de los nacional socialistas y revolucionarios a partir de los años 70 se introdujeron en ese mundo del paganismo.
En 1980 se editó la ëBiblia paganaí, con el libro "Como llegar a ser Pagano" de Alain de Benoist, editado así mismo en español por un grupo de NS, y que expone las bases esenciales del paganismo moderno.
Desgraciadamente han aparecido algunas desviaciones inevitables, especialmente sectas y esoteristas, que aveces han dado un aspecto sectario y neurótico a estas ideas básicas.
El gran reto del paganismo es compaginar la cosmología pagana con la aceptación de que NO creemos en los dioses, no somos wotanistas en un sentido religioso-personal, como sucede en el Cristianismo. No existe Wottan como dios-persona, sino como Representación de esas ideas de nuestra concepción global. Somos espiritualistas pero no sectarios ni adivinos, ni magos, ni adoradores de dioses personales. Somos paganos porque creemos en los valores del Paganismo,en un mundo infectado de Jerusalem.